LECTURAS | ¿Quién mató a Michael Jackson?, de Paul Morley
Desde que inició su carrera con los Jackson Five, Michael Jackson nunca dejó de figurar en el mundo de la farándula, tanto por su trabajo como por sus escándalos.
Ciudad de México, 25 de junio (MaremotoM).- Hoy hace 10 años que moría Michael Jackson (1958-2009), en su propia cama, adormecido por tantas drogas y quizá embarrado por su propia historia, que hoy consideramos tremenda, atroz.
En ese tiempo trabajaba como editora en el periódico El Universal. La primera alarma vino de José María Arreola, quien por un chat me dijo: Parece que murió Michael Jackson.
Era la tarde. Ya habíamos terminado de cerrar el suplemento, que por entonces se llamaba Kiosco y estábamos todos muy cansados. El otro editor, Salvador Frausto, armaba lo que íbamos a llevar la próxima edición y toda la ciudad aislada por el virus de la influenza.
Recuerdo que vino una conductora de Canal 11, a pasear por la redacción, como tantos otros pasaban por ahí y recuerdo que cuando le fui a dar un beso porque me la presentaron, me dijo: ¡No! Estamos en influenza.
Desde que inició su carrera con los Jackson Five, Michael Jackson nunca dejó de figurar en el mundo de la farándula, tanto por su trabajo como por sus escándalos.
Ya separado de sus hermanos y en medio de una polémica familiar, pues su hermana Latoya acusó a su padre de abuso, el éxito mundial lo alcanzó en la década de los 80 gracias a temas como Thriller, el disco más vendido de él y seguramente el más valorado. Del disco Thriller dice su productor, Quincy Jones, con el que ganaron siete premios Grammy, “compuso un montón de temas maravillosos. Luego yo los tomé y los llevé adonde tenían que llegar. Ése es el trabajo de un productor”
A la par de su éxito como cantante, la vida de Jackson siempre fue objeto de escrutinio público. Su imagen comenzó a dar de qué hablar cuando el cantante se operó la nariz y aunque la sorpresa no pareció ser tan grande, cuando Jackson modificó las facciones de su rostro y su piel se aclaró, los comentarios no pararon.
Además, su vida amorosa también “alborotó”, desde su boda con Lisa Marie Presley hasta su paternidad, todo lo que El Rey del Pop hacía generaba polémica.
En 1993 suspendió su gira Dangerous poco tiempo después de que se supiera que era adicto a los analgésicos.
En 1993, un juicio por abuso sexual de un menor marcó el inicio del ocaso para el cantante. Tal incidente le costó a Jackson no sólo mucho dinero (tuvo que pagar 23 millones de dólares a la familia del menor), sino también la credibilidad y confianza que muchos de sus seguidores tenían en él.
En estos 10 años todos recordamos sus temas. Probablemente poca gente fue tan talentosa en la música pop. Sin embargo, un video donde se comprueba las muchas denuncias en su contra que transmitió HBO, nos deja estupefactos.
Como aquella vez que murió, el video Leaving Neverland, dirigido por Dan Reed, muestra el relato de las víctimas, sin intentar saber si es cierto o no, deja a los muchachos narrar la manipulación a las que fueron sometidos.
El cantante, al morir, tenía miedo a engordar y sólo hacía una comida al día, aun cuando pesaba poco más de 57 kilos y medía 1.78 metros. Esa fue su imagen al morir, cuando soñaba con regresar por todo lo alto.
En la sociedad, ese es el ídolo que nos toca. Un gran talento y una vida atroz, tremenda, donde dejó dos hijos y muchas heridas. Somos imperfectos, no hay ídolos, pero qué hermosa suena la canción “Billie Jean” en la voz de otro muerto, Chris Cornell.