Dan tiene que dejarlo todo y volver a casa a cuidar a sus padres: “Arde mi casa y yo me río de todo. ¿Qué harías tú?”
Ciudad de México, 7 de mayo (MaremotoM).- Estos son los Marshall: El padre, Bob, un empresario de éxito que corría maratones. Ahora no puede ni moverse y su hijo mayor, Dan, tiene que lavarle las pelotas todas las mañanas. La madre, Debi, una fuerza de la naturaleza que los mantenía unidos a todos con su amor. Ahora tiene cáncer y se pasea por casa en bata comiendo yogures. La hermana mayor, Tiffany, trabajaba y estudiaba a la vez. Ahora ha perdido los nervios y empieza a plantearse si la religión es la respuesta.
El hermano gay, Greg era feliz, acababa de salir del armario y conocía a alguien interesante cada noche. Ahora lleva doce meses sin follar. Otra hermana, Chelsea, una niña prodigio. Ahora piensan que quizá sea autista.
La hermana adoptada, Jessica, una adolescente con una gran sensibilidad. Ahora quiere fugarse con su entrenador de lacrosse, un mormón 25 años mayor que ella.
Dan tenía un gran trabajo en Los Ángeles y una novia increíble. Ahora duerme en el sótano de la casa de sus padres, entre pises de gato.
Hay desgracias que sólo se pueden compartir con la risa, encuéntralos en Arde tu casa, de Dan Marshall, edición Blackie Books.

Dan Marshall nació en 1982 y creció en Salt Lake City, Utah. Estudió en UC Berkeley y después trabajó en el departamento de comunicación de una empresa de Los Ángeles. A los veinticinco años, su vida dio un giro: se vio obligado a dejar ese trabajo para volver a su casa a cuidar a sus padres. Fue en ese periodo cuando empezó a escribir sobre las aventuras trágicas y que de algún modo él supo ver cómicas hasta la carcajada, que había vivido y que estaba viviendo. De ahí salió Arde tu casa. Después de aquella etapa, Marshall volvió a Los Ángeles, donde estudió escritura de guiones y encontró su hueco en Hollywood escribiendo comedia. Uno de los guiones que le encargaron fue el de su propio libro, cuya adaptación dirigirá Jonathan Levine y protagonizará Miles Telles, la estrella de filmes como Whiplash. De todo aquel episodio familiar nefasto, salió su verdadera vocación.
